Hugo Masana Sepúlveda, Gerente General Aguas Antofagasta:


Desalación: el futuro sustentable mira hacia el mar

Hablar de escasez de agua potable en Antofagasta, no es un tema simple. Primeramente, porque no existe y eso es gracias a la desalación. Y en segundo lugar, lo que hay es una mayor demanda de agua debido a un crecimiento demográfico y productivo que ha sido impresionante.

En los últimos años, la ciudad de Antofagasta ha crecido en promedio un 3% anual, es decir, a 2030 habrá aumentado su demanda de agua en más de un 45%; si el nivel de crecimiento y actividad de la región continúa.

Haciendo un poco de historia, en marzo de 2009 Aguas Antofagasta adquiere una planta desaladora, la cual se comienza a operar y ampliar, con personal propio altamente capacitado. Asimismo, un año antes entra en operaciones una planta de menores dimensiones en la comuna de Taltal. Todo lo anterior, basado en la experiencia internacional que muestra a la osmosis inversa como la mejor alternativa, dada su alta confiabilidad, lo que se refleja empíricamente en más de 1.600 plantas operando en el mundo, principalmente en España, Israel, Australia y otros países. Cabe destacar que para 2016 se estima desalar 1,5 millones de lts/seg. en el mundo.

Nuestro orgullo como antofagastinos es grande, pues nos hemos convertido en la ciudad líder a nivel latinoamericano en el uso de desalación para el consumo humano, dejando además capacidades instaladas en soluciones y actualizaciones, a través de la experiencia y el desarrollo de interesantes seminarios internacionales.

Para nosotros, la construcción de nuevas plantas desaladoras en la costa, es una gran oportunidad para asegurar el crecimiento en el largo plazo de nuestra región, donde el suministro continuo de agua para los clientes es una condición para el desarrollo de la vida en el desierto -uno de nuestros lemas- con soluciones sustentables de largo plazo.

No hay que dejar de considerar que las plantas, en lo que a estructura concierne, pueden durar hasta 50 años y los equipos entre 25-30 años, recalcando que con un buen trabajo de mantención y renovación de equipos, pueden mejorarse esos tiempos y permitir la ampliación de módulos en su capacidad de producción.

Para la ciudad de Antofagasta, hoy el recurso proviene de la cordillera en un 40%. Sin embargo, el aumento de su población y mayor consumo de agua, lo hemos abordado con una visión sustentable. Entonces, la alternativa obligada es mirar hacia el mar y estamos convencidos que hoy la mejor opción que existe es la desalación y como región seremos un ejemplo y es nuestro objetivo convertirnos en capital latinoamericana en este proceso con plantas de gran capacidad.

Aguas Antofagasta, con su experiencia y conocimiento reconocido internacionalmente, puede ser un aporte real para generar soluciones de escasez de agua al país, que esperamos opte por esta solución al problema hídrico que amenaza al mundo entero.

Hugo Masana Sepúlveda, Gerente General Aguas Antofagasta

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