Entre septiembre y el próximo mes de diciembre vencen los subsidios al consumo de agua potable de unas 80 mil familias beneficiadas a lo largo de todo el país, por lo que las empresas sanitarias asociadas en ANDESS están haciendo reiterados llamados a sus clientes para que revisen su situación particular.

Aunque el porcentaje total no parezca alto, es necesario hacer notar que en algunas compañías, como Aguas Chañar o Aguas Patagonia, vence la totalidad de los subsidios de sus clientes.

Con este propósito Esval, por ejemplo, está trabajando coordinadamente con los 33 municipios de su área de concesión, para informar a los beneficiarios sobre este trámite, ya que en octubre vence el 61,16% de sus subsidios, otorgados a un total de más de 58 mil clientes, al cumplirse los tres años de su duración.

En la actualidad, la industria atiende a cerca de cuatro millones y medio de hogares en todo el país, 700 mil de los cuales -un 16%- cuentan con algún grado de apoyo para el pago de sus cuentas de agua. Pese a su indiscutible ventaja, no ha habido un aumento significativo de la cantidad de subsidios, en relación con el aumento de la población atendida por las compañías.

Por esta razón, y para optimizar los recursos existentes, ANDESS propone la instalación de una mesa de trabajo en conjunto con el ministerio de Planificación, donde se aborden las problemáticas de su cobertura y mejoramiento de los mecanismos para su entrega. Especialmente, se requiere incentivar el levantamiento de las fichas de protección social; la formación de listas de espera que faciliten su reasignación, mejorar la infraestructura y la capacidad de recursos humanos disponibles a nivel de municipios para el trabajo de SAP, y potenciar el trabajo conjunto entre municipios y empresas sanitarias, para identificar oportunidades de focalización de la asignación de subsidios y desarrollar un plan de capacitación directa a quienes gestionan el proceso.

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