Empresa: Esval
Medio: Diario Financiero
Fecha: 15 de febrero de 2022
La construcción de una tubería reversible -por $ 28.000 millones- entre el embalse de Los Aromos y la desembocadura del Río Aconcagua ha resultado fundamental para garantizar el agua a la población.
Cada semana que pasa, la escasez de agua se agrava aún más en amplias zonas del país. Prueba de ellos es que hace unas semanas la localidad cordillerana de Potrero Grande en las cercanías de Curicó, Región del Maule, anunció cortes de suministro por tiempo indefinido y este lunes fue la municipalidad de Nogales, en la Quinta Región, la que se sumó a la adopción de esta drástica medida.
En un principio, la acción para los usuarios del sistema municipal de El Melón estaba fijada para marzo próximo pero la aguda disminución de los volumenes de los pozos y la carencia de lluvias que afecta a la zona, obligó al municipio a adelantar la decisión. De este modo, el corte de suministro se realizará diariamente entre las 14 hrs y las 18 hrs, y afectará a 2.200 personas aproximadamente.
De acuerdo a la alcaldesa de Nogales, Margarita Osorio, las medidas se mantendrán ‘hasta que se recuperen las napas con las lluvias’.
Y sostuvo que ‘el objetivo de esta medida es que, durante el tiempo de corte, los pozos puedan recuperar -en parte- su nivel de agua y así no afectar de mayor manera a la comunidad’.
‘Tenemos más del 40% de pérdida de agua de los estanques y me apuré en hacer un proyecto que presentamos al Servicio de Salud, pero estuvo dos años sin avance’, agregó.
Colaboración ciudadana
Según datos de la alcaldía de Nogales, cerca del 40% de los usuarios del sistema municipal de El Melón no paga el servicio de agua potable, lo que ha afectado seriamente la infraestructura del servicio por falta de mantención. Y, pese a que desde el municipio estarían intentado revertir esta situación, la respuesta ciudadana no ha sido suficiente.
Desde hace un tiempo, la autoridad generó convenios entre los vecinos que les permitía disminuir el monto de la deuda. Sin embargo, a principios de enero, la Contraloría General de la República obligó al municipio a hacer efectivo el cobro de la totalidad del monto o en su defecto, al menos, la aplicación del convenio. Así, quien no pague por el servicio de agua prestado, será objeto del corte total de dicho suministro.
‘Hay mucha gente que dice ‘alcaldesa, siempre estamos al día’ y hay personas que han hecho convenios. Pero también hay mucha otra gente que no los quiere hacer’, según explicó la alcaldesa.
Pese a este escenario, Osorio recalca que la responsabilidad no está en el comportamiento de los vecinos, sino en ‘las autoridades que administran los municipios’. De acuerdo a las cifras que maneja la Unidad de Agua Potable de la zona, el pozo que antiguamente entregaba 40 litros por segundo y que se alimentaba de las aguas del estero El Garretón, se encuentra completamente seco. Otro caso es el del Pozo Cemento Melón que bajó de 17 litros por segundo a seis litos; y el del Pozo nº 5 disminuyó de 7,5 lts por segunda a 4,5 lts.
En este sentido, la alcaldesa reiteró su llamado a cuidar el agua, con el objetivo de que este racionamiento no se extienda por un período más prolongado. ‘Prefiero tomar medidas a que la gente no tenga agua para tomar’, afirmó en entrevista con Radio Portales.
Sanitaria asegura Suministro
Alejandro Salas, gerente regional de la Empresa Sanitaria de Valparaíso, Aconcagua y Litoral (Esval), que abastece de agua potable a las comunas de Viña del Mar y Valparaíso, señaló que pese a la profundidad del problema, desde la empresa han ‘logrado esquivar el racionamiento’ a partir de un plan de inversiones por más de $100.000 millones solo en la cuenca del Aconcagua durante la última década.
Además, el ejecutivo indicó que ‘la obra que ha salvado la temporada 2021-2022 ha sido la construcción de una tubería reversible entre el embalse de Los Aromos y la desembocadura del Río Aconcagua, en la planta de producción de agua potable en Concón’.
En este escenario, Salas indicó que este proyecto permite ‘asegurar el abastecimiento al entrar en un ciclo anual de carga y descarga del embalse, sostenible en el tiempo: Acumulamos en invierno, cuando el riego es menor, permitiendo enfrentar los periodos de mayor consumo, marcados por las altas temperaturas y el aumento de la población flotante’.